La risoterapia en el entrenamiento canino.
Beneficios de la risoterapia, como terapia natural.
La risa es uno de los mejores remedios naturales para combatir los problemas de estrés y la saturación emocional. Seguro que has oído hablar en muchas ocasiones de la risoterapia, una terapia natural que consiste en provocar situaciones favorables a la risa y utilizar el humor para aliviar la tensión emocional. Pues bien, los perros no son ajenos a los beneficios de este tratamiento alternativo. Si el entrenador, el propietario o el guía consiguen estar positivos, motivados y relajados establecerán una mejor interacción con su perro. En este artículo vamos a ocuparnos de los beneficios de la risoterapia en el entrenamiento canino.
Como dijo Z. Harsanyi, “nada debe tomarse en serio en este mundo; la verdadera sabiduría consiste en saber reír».
La risa y el buen humor tienen numerosos efectos positivos en la salud. Lo demuestran estudios científicos realizados por investigadores de todo el mundo. Cuando reímos activamos el sistema inmune y nos hacemos más resistentes a las infecciones. Reducimos el estrés, segregamos más serotonina (hormonas de la felicidad), oxigenamos mejor nuestro cuerpo, aliviamos la tensión muscular, reducimos la hipertensión y activamos de una manera ligera y agradable el sistema cardíaco.
Todo esto pasa en nuestro cuerpo cuando reímos y nos tomamos la vida con humor y se traduce en un estado emocional mucho más óptimo y positivo que nos convierte en personas más agradables. Por ejemplo, los efectos psicológicos de la risa hacen que toleremos mejor el dolor, reducen la ansiedad, producen sensación de felicidad e incrementan nuestra energía.
Alguien que ríe deja de sentirse ansioso, enfadado o triste en ese momento y recarga sus pilas para afrontar mejor situaciones posteriores. Es decir, un buen rato de risa nos hará afrontar mejor los desafíos venideros y, por supuesto, a relacionarnos mejor con los que nos rodean, incluidos nuestros perros. De hecho, la risa nos ayuda a crear nuevas conexiones emocionales con los demás, basadas en vínculos positivos. Y eso los perros lo detectan, lo valoran y lo agradecen. De ahí la importancia de la risoterapia en el entrenamiento canino.
Claves para aplicar la risoterapia en el entrenamiento canino.
Las sesiones de risoterapia con perros son grupales. La estrategia consiste en aprovechar las situaciones divertidas y basadas en el humor para establecer vínculos emocionales positivos entre los propietarios, los guías o los entrenadores caninos y sus perros. La terapia de la risa en grupo se plantea como un juego basado en la alegría y la vitalidad. Y, al final del proceso, logran transmitirse hacia los animales y establecer con ellos una relación de mejor calidad.
De esta manera, mejora la relación entre los guías caninos y los perros porque resulta:
Más natural y espontánea basada en emociones sinceras y profundas, ejerce una influencia más positiva sobre el animal y se libera de condicionantes negativos, como la tensión, el miedo o el estrés.
Todo esto es importante porque un buen guía o entrenador canino debe dirigir las emociones de su perro. Tiene que ser capaz de comunicarse con él de manera efectiva y positiva, estableciendo entre ambos una relación divertida y de confianza. Si la persona no está equilibrada emocionalmente, difícilmente conseguirá transmitir todo esto a su perro y lograr interacciones positivas con él.
José Antonio Mézlau, creador del Grupo Yaakun, hace tiempo que introdujo las sesiones de risoterapia en su Escuela de Entrenadores Caninos, Liderazgo y Desarrollo Personal. En este vídeo podéis ver un ejemplo de alguna de estas sesiones. Mézlau basa su estrategia en la metodología ECOE (Entrenamiento de Contacto Emocional) y considera que “un gran líder o entrenador canino sabe que la risa es una herramienta muy eficaz para el adiestramiento y la educación de un perro”. Os dejamos aquí otro ejemplo de juego positivo entre guías caninos y sus mascotas, basado en la metodología del Grupo Yaakun.
La cuestión es que los guías o entrenadores caninos también necesitan apoyo y motivación para establecer una buena relación con su perro. Por ejemplo, necesitan herramientas para comunicarse mejor con ellos, directrices para saber que trabajan en la correcta dirección, asesoramiento sobre las mejores formas de fortalecer sus vínculos con sus animales y orientación para autoconocerse y conseguir una mejor gestión de las emociones de ambos.